Para un adulto, la paz puede ser un concepto abstracto, político o filosófico.
Pero para los niños… la paz se vive, se toca y se siente.

La paz puede ser que nadie se empuje.
Que alguien te escuche.
Que te dejen terminar tu trabajo.
Que te ayuden cuando no puedes.
Que te den tiempo para hablar.
Que te abracen cuando lloras.

En el Colegio Montessori de Querétaro hablamos de paz todos los días, no solo como una palabra bonita, sino como una práctica real que se construye en el ambiente, en las relaciones y en la forma en que acompañamos.

Pronto compartiremos en esta sección pequeñas joyas que nos regalan los niños con sus palabras, dibujos y reflexiones.
Porque ver el mundo a través de sus ojos es recordar lo que realmente importa.